La medida en la que las escuelas, distritos y estados son responsables del desempeño de los estudiantes bajo la Ley Federal Que Ningún Niño se Quede Atrás del 2001 firmada por el presidente George W. Bush. Cada estado tiene la libertad para definir el Progreso Anual Adecuado (AYP). Todos los estudiantes, incluso los de los programas de educación especial, deben demostrar Progreso Anual Adecuado, hasta el año 2014 cuando la ley asume todos los estudiantes han cumplido con las normas. Es muy probable que la fecha de 2014, y tal vez la noción de progreso anual se cambiarán significativamente con la reautorización de No Child Left Behind (NCLB). Habrá una propuesta para mejorar esta ley en un futuro próximo.