Los escorpiones son artrópodos depredadores. Tienen ocho patas, un par de pinzas y una cola muy larga (a veces con un aguijón venenoso en el extremo, pero sólo existen 25 especies capaces de matar a un ser humano). Su tamaño va desde 9 mm hasta 21 cm, y se pueden encontrar en todos los continentes excepto en la Antártida. El exoesqueleto de los escorpiones brilla bajo la luz ultravioleta debido a los químicos fluorescentes que contiene. Son fotofóbicos (es un mecanismo de defensa contra sus depredadores) y nocturnos. Los escorpiones matan a sus presas tanto, aplastándolos como con veneno, y tienen una cavidad pre-oral para digerir los alimentos, ya que sólo pueden comer líquidos. También tienen un metabolismo bajo en combinación con un gran órgano de almacenamiento de alimentos y un estilo de vida sedentario cuyo resultado es que los escorpiones son capaces de sobrevivir hasta un año sin alimentarse.